El Comercio Exterior, es una rama vital para el desarrollo económico mundial. Permite a las industrias nacionales colocar los excedentes de producción, encontrar mejores proveedores y, por lo tanto, incrementar las ganancias.

Gracias al intercambio de bienes y servicios entre países, el desarrollo económico puede ser posible para todas las naciones del mundo.

El comercio exterior, ha demostrado que las personas podemos tener acceso a toda clase de productos sin importar que su fabricación sea en otro lugar. Y mejor aún, es la muestra de que la cooperación internacional es tangible. 

Gracias a esto, los países pueden abastecerse de los recursos en escasez, y de este modo cubrir las necesidades de la población.



El comercio, ha estado presente desde los inicios de la sociedad, y la historia evidencia que es uno de los pilares para el progreso de las civilizaciones. 

La importancia del comercio exterior.

Los números son realistas: sin comercio exterior, la economía nacional se desplomaría. 

Y es que el comercio exterior representa fuentes de empleo, expande el mercado para las empresas, estimula la cooperación internacional y previene la escasez de recursos.

México se ha convertido en líder en exportaciones de varios sectores productivos como la electrónica y materias primas. 

Para el 2020, las ventas al exterior representaron el 38.78% de nuestro PIB, colocándolos en los primeros 50 puestos entre 191 países del rankin de exportaciones. 

Según especialistas del Consejo Mexicano de Comercio Exterior, las exportaciones tendrán un crecimiento interanual del 9%, lo que es sinónimo de una recuperación económica después de la crisis generada por el COVID-19.

Beneficios del comercio exterior.

Los beneficios son directamente económicos, pero con una buena cooperación mundial, podrán ser de gran impacto humano.

Vivimos en un siglo donde el consumismo generacional nos envía un mensaje: los recursos se están agotando si no buscamos una economía sostenible. Uno de los beneficios del comercio exterior, es el acceso a materias primas.

Y con ello, el flujo que permita satisfacer las necesidades de la población mientras encontramos modelos de consumo más sostenibles y amigables con los recursos naturales.

Otro de los beneficios lo podemos notar en la variedad de productos que tenemos. Actualmente, podemos comprar hasta lo menos imaginado, basta con buscar en alguna aplicación de venta en línea.

Y es en este intercambio de mercancías y servicios donde surge el crecimiento económico y, en consecuencia, una mejor calidad de vida para todos.



Pues el beneficio económico se puede traducir en mejores condiciones de vida, en relaciones diplomáticas estables y transformar la competitividad, en cooperativismo.

Ventajas y desventajas del Comercio Exterior.

Hace aproximadamente un siglo, se puso sobre la mesa una serie de debates de carácter político y económico a nivel internacional. El sistema económico comenzaba a dividirse en ideologías de todo tipo.

Algunos líderes mundiales apostaban por la liberación de la economía con el comercio exterior, mientras otros veían en esto una colonización a través del poder adquisitivo de las grandes potencias.

Pasaron guerras, nuevas ideologías y el mundo no se detuvo, el comercio exterior y las economías de apertura fueron tomando cada vez más fuerza, hasta que se llegó al punto de generar mejores relaciones comerciales.

Actualmente, el comercio exterior tiene tanto impacto en el desarrollo económico, que todo arancel, acuerdo, tratado o acción comercial de un país, es visto por otros ya sea como un mensaje de paz o de insinuaciones bélicas. 



La mayoría de los especialistas se inclinan por una visión con más ventajas para el Comercio Exterior. Vale la pena analizar las dos caras de la moneda.

Ventajas.

Entre las ventajas encontramos:

• Aumento en la fuente de empleo.
• Atracción de inversión extranjera.
• Estímulos a la productividad industrial.
• Mayor recaudación fiscal del gobierno.
• Acceso a tecnología.
• Acceso a productos y servicios de mayor calidad.
• Desarrollo económico.
• Mayores utilidades para las empresas.
• Flujo de materias primas.
• Cooperación internacional.

Desventajas.

Por otro lado, tenemos las siguientes desventajas:

• Mayor probabilidad de propagación de enfermedades.
• Plagas en flora y fauna.
• Explotación laboral.
• Fractura de relaciones diplomáticas por abusos comerciales.
• Afectar la industria nacional.

Algunos casos de éxito en el Comercio Exterior.

Todos los países que en las últimas décadas optaron por una apertura económica, han sido casos de éxito. 

Tal es el caso de India, Vietnam y Uganda, que experimentaron un crecimiento económico veloz y un mayor alivio de la pobreza, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Por ejemplo el caso de Vietnam, donde aproximadamente 40 millones de personas salieron de la pobreza gracias a la entrada del Comercio Exterior en esta nación, de acuerdo al Foro Económico Mundial.



Otro caso de éxito en comercio exterior sin duda es nuestro país. México es el primer exportador al mundo de aguacate, tomate, cebolla, chile verde, sandía, mango, papaya, cerveza, tequila, entre otros productos.

Tan sólo la producción electrónica en Estados como Nuevo León, Coahuila y Jalisco, genera aproximadamente 500 mil empleos directos. Ubicando a México entre los principales exportadores de televisiones y teléfonos celulares.

Gracias a la logística, al comercio exterior y a las relaciones comerciales que tenemos con países como EUA o Canadá, de quien somos uno de los principales socios comerciales, México puede convertirse en una potencia económica.

Los datos son contundentes, sin comercio exterior, las naciones no tendrán un desarrollo económico y humano estable.

Por ello, es importante formar parte de las importaciones y exportaciones. Transformar la visión de las empresas y abrir las puertas del mercado internacional.

Con ayuda de asesores profesionales, podemos encontrar más ventajas que desventajas y, sobre todo, ser caso de éxito en Comercio Exterior.